Lifting y alivio en 5 minutos: por qué la luz roja e infrarroja está cambiando la belleza (y tu bienestar)

Lifting y alivio en 5 minutos: por qué la luz roja e infrarroja está cambiando la belleza (y tu bienestar)

La tecnobelleza evoluciona hacia soluciones reales para problemas cotidianos: descolgamiento facial, rigidez cervical, tensión mandibular o piel cansada. Nuestro Lifting Infrarrojo MultiRelief™ combina luz roja (660 nm) e infrarroja cercana (830 nm) para actuar en la superficie de la piel y en profundidad en los tejidos, con dos objetivos claros: reafirmar y aliviar.

No lo decimos solo nosotros. En La Vanguardia, la experta en medicina estética Rita Sêco explica que esta terapia, conocida como fotobiomodulación, emplea luz de baja intensidad para estimular la curación, reducir la inflamación y mejorar la salud de la piel y los tejidos. Es decir: exactamente el tipo de respuesta que buscamos cuando queremos una piel más firme y un cuerpo con menos molestias. Puedes leerlo aquí:
👉 La Vanguardia (Belleza): “La terapia de luz roja es ideal para pieles envejecidas y apagadas”: https://www.lavanguardia.com/magazine/belleza/20250915/11060488/rita-seco-experta-medicina-estetica-terapia-luz-roja-ideal-pieles-envejecidas-apagadas-brillo-efectiva-requiere-cuidados.html

Cómo actúa MultiRelief™

  • Luz roja 660 nm (superficie): estimula colágeno y elastina, mejora la firmeza y suaviza líneas y arrugas.

  • Luz infrarroja 830 nm (profundidad): llega a músculos y articulaciones para reducir inflamación, aliviar tensión y favorecer la recuperación.

Por qué gusta tanto

  • Resultados prácticos en solo 5 minutos al día y sin procedimientos invasivos.

  • Versatilidad real: mentón y cuello para lifting; mandíbula (bruxismo), cervicales o espalda para aliviar molestias.

  • Portátil y cómodo: se ajusta, pulsa y listo; perfecto para integrar en la rutina.

Si buscas un rostro más firme y menos dolor al final del día, la combinación roja + infrarroja es la apuesta más completa: cuida la piel por fuera y los tejidos por dentro. Y como señala el reportaje de La Vanguardia, la clave está en la constancia: pequeñas dosis regulares que activan los mecanismos naturales de reparación del cuerpo.